Hábitos y Maloclusiones

Hoy os hablaremos de la relación que existe entre los hábitos y las maloclusiones (mordidas incorrectas), y cómo estos hábitos afectan a nuestra oclusión (mordida).

Destacaremos como principales hábitos perjudiciales y más habituales:

* Hábito de Succión del pulgar: este hábito puede contribuir a crear una maloclusión (mordida incorrecta) siempre y cuando persista más allá de los tres años y medio de edad con intensidad y frecuencia significativa.

* Hábito de deglución atípica (tongue thrust): es el hábito de tragar metiendo la lengua entre los dientes. Todos los niños tienen en algún momento este tipo de deglución que generalmente de manera espontánea se convierte en una deglución normal poniendo la lengua detrás de los dientes al tragar. Si a partir de los 5 años de edad este patrón anómalo persiste se considera un elemento a tener en cuenta ante la posible presencia de una mordida abierta y se debe corregir.

 

* Hábito de respiración oral: nos referimos en este caso al hábito adquirido de respirar por la boca en lugar de por la nariz. Puede producirse por hipertrofia amigdalar (amígdalas grandes), hipertrofia adenoidea (vegetaciones muy desarrolladas), rinitis alérgica, hipertrofia de cornetes…, patologías que deben ser valoradas por un otorrinolaringólogo pues contribuyen a empeorar maloclusiones existentes, dificultar su corrección y favorecer un patrón de crecimiento facial vertical poco armónico.

Asimismo queremos mencionar que existen otros hábitos anormales que pueden tener efectos negativos sobre el desarrollo dentofacial como por ejemplo la interposición o atrapamiento del labio inferior por los incisivos superiores (en niños con paletas superiores muy salidas o mandíbulas muy pequeñas) y la onicofagia (morderse las uñas) que sobrecarga los dientes, la musculatura y las articulaciones de la mandíbula.

Por eso, recomendamos y explicamos a los niños y a sus padres la importancia que tiene el respirar por la nariz, evitar chuparse el dedo, morderse las uñas, mascar muchos chicles, comer pipas, caramelos…con el objetivo de evitar problemas en su mordida y disfrutar de una buena salud bucal, buena masticación y una magnífica sonrisa.